Erik Llanos – Bolívar sigue impecable en esta Copa Libertadores y muy cerca cuartos de final. Los dos goles de diferencia ante el Atlético Paranaense mantienen la ilusión intacta de avanzar y dar ese paso en suelo brasileño.
Manteniendo la base del equipo que hizo la mejor fase de grupos de la historia, Beñat apostó por todo su potencial en ofensiva y alineó a los «4 fantásticos: Pato, Savio, Xico y Ronnie». El chileno, que venía de una sequía en la liga, marcó dos goles de gran factura y fue la figura indiscutida. En el podio también sitúo a Bejarano, que sin duda está en su mejor momento desde que llegó a la academia, y a Villamil que una vez más demuestra que es el mejor jugador boliviano de la actualidad. En general todo el equipo jugó a gran nivel, dejando en claro que este equipo está plenamente en «modo libertadores».
Hasta aquí Bolívar ya cumplió en esta copa, independientemente del resultado en Brasil. El partido de vuelta será muy distinto y muy difícil, pues los equipos brasileños demuestran la diferencia futbolística con el resto del continente, y sobre todo con nuestros equipos, cuando juegan de local.
¿Cómo jugar de visitante? La experiencia ante Palmeiras servirá de antecedente para no repetir los errores en ese encuentro. Intentar jugar de igual a igual sería un suicidio y catastrófico. Considero que la academia debería apostar por dos líneas defensivas sólidas y buscar de contra alguna ocasión de gol. Aunque Beñat pregona de intentar jugar siempre con vocación ofensiva, incluso de visitante y así lo demostró en esta copa, ahora deberá ser más cauto porque se trata de un partido de clasificación. Estoy convencido que este equipo dará pelea en Brasil y aún si queda eliminado, me quedo conforme con lo mostrado hasta ahora, pues para mi es el mejor rendimiento futbolístico de un equipo boliviano en torneos internacionales desde que tengo memoria, incluso superando al Bolívar semifinalista de 2014.
Erik Llanos periodista