La Paz, 14 de mayo 2025 (ATB Digital).- Un grupo numeroso de personas llegó la noche de este martes hasta las puertas del histórico Palacio Quemado para expresar su apoyo al presidente Luis Arce y a su decisión de declinar su candidatura a la presidencia, con el fin de evitar la dispersión del voto e impedir el retorno de la derecha fascista a Bolivia.
Apenas salió de Palacio Quemado, el jefe de Estado fue alzado en hombros por sus seguidores y organizaciones sociales, empuñando la tricolor nacional, la wiphala y la bandera del MAS-IPSP.
“¡Lucho no está solo!, ¡Lucho no está solo!”, coreaban los seguidores del presidente.
“Esta es una muestra de apoyo de que los nueve departamentos lo respaldan”, afirmó el vocero del Pacto de Unidad, Vidal Gómez, al anunciar que se realizará una reunión para adoptar una postura ante la decisión del presidente de no buscar la reelección en las elecciones del 17 de agosto.
“Nosotros, la gran mayoría del partido ha decidido que él debe conducir siempre a las elecciones 2025 y 2030”, insistió el dirigente.
Arce asumió la decisión de declinar su candidatura para que el bloque nacional popular no sea derrotado en las elecciones de agosto y se allane el camino para el retorno de la derecha fascista.
A Evo Morales le desafió a no insistir en su candidatura y al presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, a que trabaje en sus palabras de la necesidad de consolidar la unidad de la izquierda boliviana.
Por su cuenta de Facebook, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, destacó la decisión del jefe de Estado y señaló que está a “la altura de la historia”
“Hoy, el presidente Luis Arce nos brindó una lección profunda: la del compromiso verdadero con la revolución y con las causas populares, ése que no se grita, se demuestra. Ante la vorágine electoral y política, eligió siempre el bien común, antes que la comodidad propia”, aseguró.
Además, aseguró que en estos años “trabajó todos los días con las manos y el corazón” y que “amó a su pueblo no desde el discurso, sino desde la acción”.
“Nos enseñó que gobernar también es cuidar, que liderar también es resistir. Resistió como nadie: firme frente los vaivenes de la historia. Soportó conspiraciones, injurias y ataques; pagó por culpas ajenas sin rendirse jamás. Y aun así, siguió andando, sereno e íntegro. La historia, que no olvida a los justos, sabrá honrar tu nombre. La historia te absolverá, presidente Lucho”, le aseguró.
Fuente: ABI