Mundo, 15 de julio 2025 (ATB Digital).- Meta, la empresa matriz de Facebook, Instagram y WhatsApp, está atravesando un momento de definiciones en su estrategia de inteligencia artificial (IA). Con la reciente creación de su nuevo laboratorio de superinteligencia, se están debatiendo cambios que podrían romper con uno de los pilares más defendidos por la compañía: el uso de modelos de código abierto. En el centro de esta transformación está Alexandr Wang, nuevo director de IA de Meta y fundador de Scale AI, una startup en la que Meta ha invertido 14.300 millones de dólares.
De Behemoth al misterio: el posible abandono del modelo abierto
Durante años, Meta ha apostado por liberar el código de sus modelos de IA para fomentar la colaboración y acelerar el desarrollo de la tecnología. Su modelo Behemoth, considerado uno de los más potentes dentro de la compañía, estaba destinado a ser otro ejemplo de esta filosofía. Sin embargo, tras finalizar su etapa de entrenamiento, el modelo no habría alcanzado el rendimiento esperado, y desde hace semanas se han detenido las pruebas internas.
En este contexto, el equipo de superinteligencia, liderado por Wang, ha comenzado a discutir la posibilidad de dejar atrás Behemoth y centrarse en el desarrollo de un modelo cerrado, es decir, uno cuyo funcionamiento interno no sería accesible al público ni a otros desarrolladores. Esta decisión, que aún no ha sido confirmada oficialmente ni aprobada por el CEO Mark Zuckerberg, representaría un giro drástico en la estrategia técnica y filosófica de la compañía.
Por qué un modelo cerrado podría ser el nuevo camino
El debate entre modelos abiertos y cerrados es como el de compartir una receta de cocina con todos o guardarla en secreto. En el primer caso, se permite que otros la mejoren, la adapten y la hagan crecer; en el segundo, se protege el valor exclusivo del producto final.
Meta había defendido siempre el primer enfoque, con figuras como Yann LeCun afirmando que «la plataforma que ganará será la abierta». Sin embargo, la competencia se ha intensificado, y modelos como los de DeepSeek, en China, han aprovechado el código abierto de Meta para lanzar sus propios productos avanzados.
Frente a esto, una estrategia cerrada permitiría a Meta tener mayor control sobre el uso de su tecnología, proteger secretos industriales y optimizar recursos en un entorno cada vez más competitivo.
El laboratorio de superinteligencia: un nuevo comienzo
Desde la creación del nuevo laboratorio «Meta Superintelligence Labs», se nota un cambio de rumbo. Zuckerberg ha apostado fuerte: contrataciones con sueldos millonarios, reclutamiento de talentos de OpenAI, Apple, Anthropic y Google, e integración de figuras clave como Nat Friedman, ex-CEO de GitHub.
Este laboratorio opera de forma aislada dentro de las oficinas de Meta en Menlo Park, cerca del propio Zuckerberg. El equipo liderado por Wang, compuesto por apenas una docena de investigadores de alto nivel y antiguos empleados de Scale AI, trabaja bajo un hermetismo inusual para la cultura de la compañía. En una reunión reciente, Wang explicó que la labor de su equipo será confidencial y que toda el área de IA de Meta se concentrará en desarrollar una superinteligencia.
Una visión ambiciosa: más allá del cerebro humano
El término superinteligencia se refiere a sistemas que superarían las capacidades cognitivas humanas. No se trata solo de chatbots más elocuentes, sino de una inteligencia artificial que pueda resolver problemas complejos con una eficacia y creatividad que hoy solo atribuimos a personas brillantes.
Esta visión, aunque atractiva, exige una inversión colosal y presenta enormes desafíos técnicos y éticos. Meta ya ha demostrado que está dispuesta a asumir estos riesgos, pero también está generando tensiones internas: hay rumores de que muchos empleados que no fueron seleccionados para el nuevo equipo podrían abandonar la empresa en el próximo ciclo de liberación de acciones.
Qué podría significar este cambio para el ecosistema de IA
Si Meta opta por dejar atrás el modelo abierto, no solo estaría cambiando su estrategia, sino también influyendo en la dirección general del sector. Durante años, Meta fue vista como un referente de apertura en IA, y muchos desarrolladores e investigadores han confiado en sus modelos para crear nuevas herramientas, aplicaciones o investigaciones.
Un cambio hacia modelos cerrados podría motivar a otras empresas a seguir el mismo camino, reduciendo el acceso comunitario a herramientas avanzadas. También podría afectar la velocidad de innovación global, al convertir la IA en un terreno cada vez más corporativo y menos colaborativo.
El papel de Alexandr Wang en esta nueva etapa
Alexandr Wang, con solo 28 años, se ha convertido en una figura central en la estrategia de IA de Meta. Como fundador de Scale AI, una empresa clave en el etiquetado de datos para entrenar modelos de aprendizaje automático, Wang ha demostrado su capacidad para liderar en un sector técnicamente exigente.
Su nombramiento como director de IA y la integración de parte del equipo de Scale en Meta demuestran la confianza de Zuckerberg en su visión. A corto plazo, su rol será clave para definir si Meta se mantendrá como un referente en apertura o se replegará hacia un modelo más reservado y competitivo.
Fuente: Whats News