La Paz, 07 de nov 2025 (ATB Digital).- Con datos hasta septiembre, Bolivia cuenta con 170 plantas industriales en distintas etapas de ejecución, con una inversión pública acumulada de Bs 38.993 millones. La meta es que hasta fines de 2026 todas entren en funcionamiento.
El Gobierno reportó que, hasta septiembre, del total, 36 plantas estaban en operación; 12, en fase de prueba y equipamiento; y 122, en construcción o ampliación. Con el cumplimiento de la meta hasta 2026, se prevé consolidar el proceso de industrialización con soberanía económica, dio cuenta el Ministerio de Economía.
EJE
“El proceso de industrialización se consolidó entre 2021 y 2025 como eje del Modelo Económico Social Comunitario Productivo, orientado a sustituir importaciones, generar empleo y diversificar la estructura productiva nacional”, reportó la cartera de Estado.
Según datos del Ministerio de Desarrollo Productivo, 63 plantas cuentan con ficha técnica y financiamiento garantizado por Bs 11.274 millones, mientras que las restantes avanzan dentro del programa plurianual de inversión pública.
Durante su discurso por el Bicentenario de la fundación de Bolivia, el presidente Luis Arce destacó que “la industrialización ya está en marcha, no es un mito, es una realidad, es patrimonio del pueblo boliviano (…) El legado más poderoso que dejamos es el inicio de la industrialización como camino irreversible de nuestra independencia económica”, sostuvo.
Agregó que, en cada región, están las fábricas que generan empleos y adicionan valor a materias primas. “Estas plantas no solo producen bienes, crean empleo, ingreso para familias y generan esperanza y futuro en cada rincón del país”, expresó.
Según reportes técnicos de Desarrollo Productivo, las plantas actualmente operativas generan más de 7.300 empleos directos y 31.000 indirectos. Una vez que el conjunto de proyectos esté en plena operación, se prevé superar los 25.000 empleos directos y 90.000 indirectos, con presencia en los nueve departamentos.
Las inversiones se concentran en tres grandes áreas estratégicas. Una de éstas es Agroindustria y alimentos, destinada a fortalecer la seguridad alimentaria y el abastecimiento interno.
En el eje de energía y biocombustibles, se ejecutan proyectos como la planta de biodiésel en El Alto y la de bioinsumos de Patacamaya, que sustituyen importaciones de combustibles y fertilizantes. En el rubro de química básica y farmacéutica, avanzan los complejos industriales en Cochabamba e industrialización con sustitución de importaciones en Potosí, orientados a la producción de insumos para la construcción, la salud y la industria agrícola.
Fuente: Ahora el pueblo
