Argentina, 09 de nov 2025 (ATB Digital).- Agua hasta donde alcanza la vista, caminos convertidos en canales, vacas en busca de pasto entre el lodo y cosechas perdidas. Es el catastrófico panorama en millones de hectáreas de la Pampa argentina, inundadas desde hace meses por lluvias de una intensidad inusual.
A las precipitaciones atribuidas al cambio climático se suma la falta de mantenimiento de caminos y canales rurales y la paralización de obras de infraestructura.
«Me tuve que llevar a mi familia. En marzo nos tuvimos que ir al pueblo para que los nenes fueran a la escuela», cuenta Luciano Macaroni, ganadero del municipio de 9 de Julio, 300 km al oeste de la ciudad de Buenos Aires.
Macaroni solo puede entrar y salir de su campo a caballo por los caminos inundados. Muchos productores agropecuarios atraviesan la misma situación en el fértil centro de la provincia de Buenos Aires.
Pampa
Unos cinco millones de hectáreas, una superficie mayor que la de Dinamarca, están cubiertas de agua o son inaccesibles por el anegamiento de caminos, según la Confederación de Asociaciones Rurales.
«No pude sembrar, las vacas se me pusieron flacas de estar en el agua y no tengo forma de entrar con comida», dice Macaroni, de 46 años, a la AFP.
Un paisano le dijo una vez al folklorista Atahualpa Yupanqui que la pampa era un ‘cielo al revés’. Hoy el sol y las nubes se reflejan en muchos de sus campos, convertidos en lagunas surcadas por aves acuáticas.
Alejandro Vallan, un productor de 43 años, cree que las consecuencias se harán sentir el año próximo.
«No podemos sembrar, no tenemos animales. ¿Qué carajo vamos a hacer?», se pregunta. «Hay personas de 60 o 70 años que ahorraron toda su vida para tener sus vacas y ahora las perdieron. Es muy difícil que se recuperen».
Fuente: La Razón
