Mundo, 07 de may 2025 (ATB Digital) .- Investigaciones científicas lo destacaron como uno de los vegetales más prometedores en la lucha contra patologías crónicas debido a sus propiedades terapéuticas y su extensa trayectoria histórica en la alimentación.
En un contexto de creciente preocupación por las enfermedades metabólicas, el brócoli ganó notoriedad como un alimento funcional con propiedades terapéuticas. Cultivado desde la antigua Roma y hoy presente en cocinas de todo el mundo, este vegetal crucífero se convirtió en objeto de múltiples investigaciones científicas que validan su potencial para prevenir patologías crónicas.
Entre ellas, la diabetes tipo 2ocupa un lugar destacado debido a los mecanismos fisiológicos que el brócoli activa en el cuerpo humano, desde la mejora en la sensibilidad a la insulina hasta la reducción del estrés oxidativo.
Cuáles son los beneficios del brócoli para la salud
Según la nutricionista Andrea Ferrara, posgraduada por la Universidad de São Paulo (USP), el brócoli es una hortaliza rica en fibras, potasio, ácido fólico, calcio, magnesio, fósforo, compuestos bioactivos como el sulforafano y glucosinolatos, y vitaminas A, C y K. Esta composición compleja permite que el vegetal tenga una incidencia positiva en múltiples sistemas del organismo:
Prevención del cáncer: tanto la Escuela Superior de Agricultura Luiz de Queiroz (USP) como la Universidad Federal de Rio Grande do Sul (UFRGS) identificaron que los compuestos azufrados del brócol, especialmente los glucosinolatos y los isotiocianatos, inhiben procesos celulares asociados a la formación de tumores y mejoran la calidad de vida de pacientes oncológicos.
Salud cardiovascular: el sulforafano contribuye a evitar la acumulación de placas de grasa en las arterias, reduciendo el riesgo de aterosclerosis y otras enfermedades vasculares.
Colesterol y digestión: gracias a su alto contenido de fibra dietética, ayuda a reducir el colesterol LDL y mejora el tránsito intestinal.
Sistema inmunológico y envejecimiento: las vitaminas antioxidantes A y C neutralizan radicales libres y previenen el deterioro celular prematuro.
Fortalecimiento óseo: la vitamina K y el calcio presentes en el brócoli resultan esenciales para mantener una buena densidad mineral ósea.
Prevención de trombosis e ictus: un estudio de ACS Central Science reveló que esta hortaliza contiene fitoquímicos que, combinados con anticoagulantes, disminuyen la formación de coágulos sanguíneos peligrosos.
Cómo ayuda el brócoli a controlar la diabetes
El brócoli actúa sobre varios frentes en la regulación de la glucemia. Una investigación publicada en la revista Fitomedicina Plus sugiere que el sulforafano, compuesto responsable del aroma y sabor amargo del brócoli, podría “ayudar a controlar los niveles elevados de azúcar en sangre y la resistencia a la insulina”.
Los mecanismos descritos incluyen:
Aumento de la sensibilidad a la insulina.
Reducción del estrés oxidativo, que deteriora los vasos sanguíneos en personas con diabetes.
Disminución de picos glucémicos postprandiales, gracias al alto contenido de fibra.
Índice glucémico bajo, lo cual lo convierte en un alimento adecuado para diabéticos.
Además, investigaciones recopiladas por la Universidad de Jiangsu sostienen que el sulforafano presenta propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que protegen contra complicaciones vasculares, comunes en pacientes con diabetes tipo 2.
En paralelo, un estudio de Science Translational Medicine observó que un extracto concentrado de brócoli logró reducir los niveles de glucosa en ayunas en personas diabéticas, en comparación con un grupo placebo.
El valor nutricional del brócoli
Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, 100 gramos de brócoli crudo aportan:
- 34 calorías
- 2,8 g de proteínas
- 6,6 g de carbohidratos (de los cuales 2,6 g son fibra)
- 0,4 g de grasas
- 316 mg de potasio
- 47 mg de calcio
- 66 mg de fósforo
- 89,2 mg de vitamina C (149% del requerimiento diario)
- 101,6 µg de vitamina K (127% del requerimiento diario)
- 63 µg de folato
A este perfil se suman antioxidantes como la quercetina y el sulforafano, además de hierro, magnesio, zinc y selenio. Esta densidad de nutrientes convierte al brócoli en un alimento de alto valor biológico, ideal para personas con requerimientos especiales, como los pacientes diabéticos, embarazadas o adultos mayores.Formas creativas de incluir brócoli en la dieta: ensaladas crudas, sopas o al horno con parmesano (Imagen Ilustrativa Infobae)
Ideas para incorporar el brócoli a la dieta diaria
La versatilidad culinaria del brócoli permite integrarlo fácilmente a las comidas cotidianas. Algunas de las formas recomendadas por expertos para aprovechar su valor nutricional sin degradarlo son:
- Crudo en ensaladas: una manera eficaz de conservar la vitamina C y el sulforafano.
- Salteado con ajo y aceite de oliva: ideal para acompañar carnes o servir como plato principal vegetariano.
- En freidora de aire: consigue una textura crujiente con bajo uso de grasas.
- Asado con parmesano: intensifica su sabor gracias a la caramelización en horno.
- En crema o sopa: opción ligera si se utiliza leche sin grasa y bajo contenido de sodio.
- Combinado con sabores intensos: el brócoli rabe, de sabor amargo, se equilibra con ingredientes como salchicha o quesos curados.
Para quienes buscan alternativas menos comunes, cultivar variedades como el brócoli romanesco o el brócolini en casa puede ser una opción atractiva, con beneficios tanto nutricionales como gastronómicos.
Fuente: Infobae