Mundo, 16 de oct 2025 (ATB Digital).- A dieciséis años de la muerte de Michael Jackson, el patrimonio del “Rey del Pop” sigue generando conflictos. En esta ocasión, su hija Paris Jackson, de 27 años, mantiene un enfrentamiento legal con los ejecutores del patrimonio, John Branca y John McClain, a quienes acusa de realizar pagos indebidos y de ocultar información sobre los gastos de administración del multimillonario legado de su padre.
Según documentos judiciales, Paris presentó en julio una petición para impugnar los llamados “pagos premium”, bonificaciones entregadas en 2018 a varios bufetes de abogados por trabajos “no registrados” o “no facturados oficialmente”. Su equipo legal sostiene que estos pagos, que ascenderían a unos 625.000 dólares, fueron “gratificaciones injustificadas” y que los administradores “no tenían autoridad” para realizarlos.
En su presentación más reciente ante la corte, fechada el 3 de octubre, Paris comparó a los ejecutores con el “Mago de Oz”, alegando que “actúan con secretismo” y exigen que el tribunal confíe en ellos sin poder revisar sus acciones. También los acusó de intentar frenar la fase de investigación, lo que dificultaría esclarecer la magnitud de los pagos cuestionados.
“Los ejecutores no tienen derecho a impugnar su petición, especialmente cuando toda su evidencia proviene de los propios archivos del patrimonio”, señala la moción.
La respuesta del patrimonio
Los ejecutores respondieron el 9 de octubre, buscando desacreditar las acusaciones y revelando por primera vez cuánto ha recibido Paris desde 2009. Según los documentos citados por PEOPLE, Paris ha recibido aproximadamente 65 millones de dólares en beneficios del patrimonio.
Branca y McClain argumentan que, sin su gestión, Paris y sus hermanos —Prince y Bigi Jackson— nunca habrían recibido esa fortuna. El abogado de los ejecutores, Jonathan Steinsapir, señaló que al momento del fallecimiento de Michael, el patrimonio estaba “agobiado con deudas que superaban los 500 millones de dólares” y que, gracias a la administración, ahora el legado está valorado en más de 2.000 millones de dólares.
Sobre los pagos a los bufetes, Steinsapir aclaró que no son “regalos ni bonificaciones arbitrarias”, sino compensaciones por servicios extraordinarios, y que todos los desembolsos están sujetos a la aprobación del tribunal testamentario.
Un conflicto en curso
Paris y sus abogados buscan que se anule una orden de 2010 que permitía a los ejecutores pagar a los abogados sin aprobación previa del juez. Por su parte, los administradores sostienen que el reclamo de Paris viola la ley anti-SLAPP de California, que protege el derecho a litigar sin ser objeto de demandas abusivas.
“Por supuesto que los beneficiarios del patrimonio —incluida la demandante— pueden cuestionar las acciones de los ejecutores… Todo lo que los administradores piden es que se haga de manera procesalmente correcta”, señala la moción.
Steinsapir calificó la demanda como “infundada y difamatoria” y destacó que el tribunal ha aprobado numerosas veces la contabilidad del patrimonio en estos 16 años.
La próxima audiencia ha sido programada para el jueves 16 de octubre.
Fuente: Infobae