* ERIK LLANOS
Que alegría da ganar, golear y jugar bien. La selección consiguió dos triunfos que nos acercan a la zona de clasificación, nos invitan a ilusionarnos y sirven para marcar historia. Según el reconocido estadístico deportivo MisterChip, Bolivia no ganaba un partido por 4 o más goles hace 12 años, en el triunfo 6-1 a la Argentina de Maradona y Messi; y después de 28 años la verde consigue dos victorias consecutivas en eliminatorias, la última vez fue en 1993 cuando clasificamos al mundial. Ascendimos del noveno al séptimo lugar y con 12 puntos nos situamos a 4 del repechaje.
Sigo creyendo que es muy difícil clasificar a Catar 2022, porque para hacerlo no solo tendríamos que ganar los 3 partidos que nos quedan de local, sino también salir a buscar triunfos fuera de casa y esa asignatura aún está lejos de nuestra realidad. Cuando perdimos ante Ecuador todos firmaban la eliminación, sin embargo ahora volvió la esperanza. Que maravilloso es el fútbol.
Ante Perú, la selección jugó un partido discreto. El juego fue parejo y se desequilibró con el gol de Vaca. Esa victoria fue muy importante sobre todo en lo anímico. Ante Paraguay, la actitud desde el comienzo fue distinta con el convencimiento de que se podía ganar y así fue. Claro está también que el penal fallado por el equipo albirrojo tuvo incidencia. Lo cierto es que Bolivia fue en todo momento superior a su rival y mostró pasajes de buen fútbol. Al parecer la base está ya consolidada.
Aunque la actualidad marca que ni Perú ni Paraguay están pasando un buen momento futbolístico pese a contar con jugadores de mucha jerarquía, es siempre difícil ganar y a la verde le costaba triunfar en La Paz. Ójala este sea el comienzo de volver a hacer un fortín el Hernando Siles.
En esta triple fecha, le funcionó a Farías armar dos equipos, pero para lo que queda el venezolano debe conformar un equipo competitivo que piense en obtener victorias también fuera. Restan 6 partidos y en menos de un mes visitamos a Perú y recibimos a Uruguay. Obtener al menos 4 puntos nos mantendrían en carrera y con la ilusión intacta.
* ERIK LLANOS ES PERIODISTA