Mónaco, 30 de octubre 2022 (ATB Digital).- Una mezcla de sabores del altiplano y la Amazonia fue la propuesta gastronómica que presentaron las chefs bolivianas Valentina Arteaga y Camila Lechín en Europa. Un sinfín de sensaciones en el paladar, que protagonizaron una gala en uno de los clubes náuticos más exclusivos del mundo: el Club de Yates de Mónaco.
“Con mis platos quería mostrar un poco de este lado del país, el altiplano, y un poco del plato emblema que es la sopa de maní, única en el mundo. Camila se enfocó más en el tema amazónico y lo que queríamos mostrar con nuestro menú es la diversidad que se puede encontrar en Bolivia”, explicó Arteaga, a poco de su regreso al país luego de esta “increíble” experiencia, que se llevó a cabo el mes pasado.
Todo comenzó cuando la presidenta y cofundadora de la Asociación Latinoamericana de Mónaco (AMLA), Daniela Spanier, invitó a las cocineras a sumarse a una cena de beneficencia que tendría a Bolivia como protagonista.
La idea era mostrar el talento boliviano en su máxima expresión con pinceladas de la gastronomía, moda, música y arte del país que llevó el rojo, amarillo y verde como bandera. Una velada que, además, tenía como objetivo recaudar fondos para un laboratorio de diagnóstico y tratamiento del mal de Chagas en una zona del departamento de Santa Cruz.
“Experiencia mística Bolivia. AMLA, en colaboración con la NFL International, te invita a celebrar con nosotros en el espíritu boliviano”, lee la invitación enviada por esa organización no gubernamental que promueve el diálogo cultural, la cooperación y el intercambio entre el Principado de Mónaco y los países de América Latina.
En la cita, los presentes —connacionales y extranjeros— apreciaron la diversidad en un menú de tres pasos, que tuvo a la sopa de maní como entrada, un sudado de pescado como plato principal y un postre de chocolate amazónico con quinua y café.
Los alimentos estuvieron precedidos por bocaditos que revelaban el estilo de cada una de las chefs: sonso miniatura, palmitos ahumados con salsa, sándwich de chola y charque y mote con llajua.
“La gente estaba encantada. Nunca pensaron que podía haber una sopa de maní (…). También veíamos que la gente repetía bastante en los piqueos, sobre todo los que eran más frescos. El sándwich de chola les gustó mucho, también el sonso miniatura, que era con queso de cabra. Hubo muy buena aceptación”, percibió Arteaga, quien esa noche también recibió el premio Latin Impact Award por su “competencia, visión y orgullo en su campo de experiencia”.
Para la ocasión, las chefs llevaron varios de los insumos desde Bolivia y contaron con el apoyo del equipo del chef suizo Simon Cuel, quien también reaccionó de manera positiva a la propuesta boliviana.
“No habían visto antes insumos como el charque o el mote (…). Los colegas estaban encantados, nos pidieron las recetas y fue una muy linda experiencia para nosotras porque nos llevamos muy bien con el equipo, estaba muy dispuesto a probar nuevos sabores, nuevas técnicas”, manifestó la dueña del restaurante Phayawi, en La Paz.
Un verdadero “intercambio cultural” que llevó a las jóvenes bolivianas a compartir su cocina durante tres días —con un grupo de profesionales que desde entonces ya saben detalles de la gastronomía nacional— es el charque y cuál es su proceso de deshidratación.
“Soy una embajadora de la gastronomía boliviana con mi restaurante, que es de comida tradicional, y uno de mis grandes objetivos es resaltar la gastronomía boliviana a nivel nacional y también internacional. El hecho de salir del país y mostrar un poco de Bolivia, generar este networking con gente que jamás ha ido a Bolivia o ha comido comida boliviana es importante para mi carrera”, recalcó Arteaga.
“Lo más importante fue llevar Bolivia a Mónaco, sobre todo al Club de Yates, que era un sueño para mí. Jamás me hubiese esperado llevar esta receta (de la sopa de maní), que es de mi abuela, hasta Mónaco (…). Es un plato que nos representa y hacerlo ahí fue increíble”, agregó.
En medio de diablos y ekekos, Bolivia brilló en la costa de Mónaco. Un evento que además de la sazón de Arteaga y Lechín contó con las presentaciones de Bonny Lovy, Piraí Vaca, Milton Cortez y Beby Aponte.
Fuente: Página Siete