Mundo, 17 nov 2022 (ATB Digital).- Aura era una hembra de lince ibérico de 20 años de edad, un auténtico récord para una especie que no suele superar una quincena de años en el medio natural. El felino, fallecido el pasado 27 de octubre en el Parque Nacional de Doñana, según han informado desde el Centro de Cría en Cautividad de El Acebuche, convirtiéndose así en el ejemplar más longevo que ha prosperado a partir de un programa de cría en cautividad.
En 2002, fecha de nacimiento de Aura, el lince ibérico (Lynx pardinus) se encontraba en peligro ‘crítico’ de extinción, con solo un centenar de ejemplares en estado salvaje. Aura tuvo suerte. Fue capturada en Doñana y enviada al zoo de Jerez de la Frontera en abril de ese mismo año como parte del Programa de Conservación Ex-Situ del Lince ibérico. La iniciativa tenía un objetivo claro, la recuperación de la especie a partir de programas de cría en cautividad gracias a cinco centros de cría repartidos por toda la península, tanto en España como en Portugal. A la vista están los resultados: ahora mismo existen más de 1.300 ejemplares en libertad.
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Más de 900 descendientes de 5 generaciones
Después de unos cinco años y varios intentos frustrados de apareamiento, la hembra tuvo una primera camada de tres cachorros de lince ibérico, aunque su descendencia llegó a tener 14 crías. Seis de ellas fueron liberadas en distintos puntos de la península Ibérica, y el resto fueron a parar a distintos programas de cría en cautividad. Según los datos del programa de conservación, en total Aura tiene una descendencia de más de 900 ejemplares de cinco generaciones, contando directos e indirectos.
Así pues, a ella se le atribuye una parte importante del éxito reproductivo de la especie. Y es que, según el último censo, la población de lince ibérico alcanza hoy casi los 1.400 ejemplares, un hito que ejemplifica el éxito de los programas de conservación en España y supone un ejemplo para todo el mundo. Muy pocas especies, sostienen desde WWF, son capaces de superar una situación tan crítica como la que tuvo que enfrentarse el lince ibérico.
Ojalá en el futuro existan muchas más Auras y el lince continúe su expansión por el resto de la península Ibérica.
National Geographic