Tulio Ribeiro
¿Hasta dónde llegaremos con una tecnología que acerque al hombre y a la máquina en un campo de tal sinergia? Parece ilimitado. Nvidia hizo un gran anuncio: se trata del proyecto GR00T, un modelo básico de uso general para robots humanoides, diseñado para avanzar en su trabajo, impulsando avances en robótica e inteligencia artificial integrada. Dentro de este desarrollo, la compañía también presentó una nueva computadora, Jetson Thor, para robots humanoides basada en el sistema en un chip (SoC) Nvidia Thor, así como importantes actualizaciones de la plataforma robótica Nvidia Isaac™, incluidos modelos base de IA generativa y herramientas para simulación e infraestructura de flujo de trabajo de IA.
“Construir modelos básicos para robots humanoides en general es uno de los problemas más interesantes de resolver en la IA actual”, afirmó Jensen Huang, fundador y director ejecutivo de Nvidia. “Se están reuniendo tecnologías propicias para que los principales especialistas en robótica de todo el mundo den pasos de gigante hacia la robótica artificial general”.
El GR00T, acrónimo de Tecnología Generalista Robot 00, se producirá con la capacidad de comprender el lenguaje natural y emular movimientos mediante la observación de acciones humanas, aprendiendo rápidamente coordinación, destreza y otras habilidades para navegar, adaptarse e interactuar con el mundo real. En su charla de GTC, Huang demostró varios de estos robots completando una variedad de tareas. “Con los avances en la IA generativa ha habido un flujo constante de desarrollos en todo el ecosistema donde los modelos básicos para tareas robóticas han demostrado la capacidad de mejorar la productividad y el rendimiento de los desarrolladores de robótica”, dijo David Pinto, gerente senior de Relaciones Públicas de Nvidia.
El proyecto se centrará en el desarrollo de modelos básicos o IA generativa que utilice el aprendizaje autosupervisado en lugar de instrucción o capacitación externa. “Las ganancias de productividad van desde el desarrollo de códigos para robots hasta la generación de nuevas simulaciones para probar y entrenar robots en entornos no estructurados”, añadió Pinto: “Para que la industria de la robótica gane escala, los propios robots deben volverse más generalizables. Es decir, necesitan “agregar habilidades más rápidamente o llevar estas habilidades a nuevos entornos. El proyecto GR00T es una iniciativa importante en esta dirección para hacer avanzar a los robots humanoides en múltiples corporalidades”.
Según la empresa, los modelos base permitirán a los robots comprender mejor entornos complejos y realizar una variedad de habilidades y tareas de robots tanto en simulación como en el mundo real. Pinto también abordó las preocupaciones sobre los avances en robots con modelos de IA realizando sus operaciones, incluso cuando los modelos de lenguaje grandes (LLM) continúan desarrollando problemas, como el problema actual con las ‘alucinaciones’, en las que los modelos de lenguaje de IA producen resultados absurdos. Rui Pinto señaló, sin embargo, que “la verdadera autonomía de propósito general ‘corporizada’ está más lejos”. Es un camino sin fin. “Si podemos conseguir que los humanoides hagan un trabajo que los humanos no quieren hacer porque hay escasez de humanos, podemos vender millones de humanoides, tal vez miles de millones”, dijo el año pasado el director ejecutivo de Figur, Brett Adcock, a Associated Press.
En un análisis entre expertos de la empresa, el robot proporcionó respuestas y movimientos excesivamente realistas, parecía capaz de distinguir entre materia orgánica e inorgánica y explicó los matices de sus decisiones. Algunos medios describieron las acciones del robot como caer en el “valle inquietante”, donde la capacidad de distinguir entre auténtico y sintético se vuelve casi imposible.
En otro aspecto y al otro lado del mundo, algo está pasando en el mismo campo, por otra tecnología y manos. El primer robot humanoide femenino de Arabia Saudita sabe que no debe hablar de sexo ni de política, dice su creador. “Sara sabe que es una chica. Se supone que debe ser genial no hablar de política ni de sexo porque estamos en Arabia Saudita. No deberíamos entrar en estos temas”, afirmó Elie Metri, director ejecutivo de QSS AI & Robots. La empresa también es desarrolladora del robot Muhammad, acusado en las redes sociales de tocar inapropiadamente a un periodista durante una feria tecnológica.
En este otro contexto y de nivel tecnológico más limitado, Sara, que viste una tradicional abaya, es el primer robot humanoide diseñado y fabricado en Arabia Saudita y posiblemente en Oriente Medio. Ella es bilingüe, habla árabe e inglés. Metri explicó que Sara utiliza el modelo de aprendizaje de idiomas propio de la empresa: un programa de inteligencia artificial diseñado para reconocer y generar texto y voz. “No dependemos de las bibliotecas de nadie, ni siquiera de ChatGPT”, dijo a Insider.
Vale la pena señalar que el sistema legal de Arabia Saudita se basa en la ley Sharia, incluso con acciones para evolucionar los estándares en la sociedad saudita en los últimos años. Lamentablemente, las mujeres todavía pueden ser castigadas por su activismo político, y los debates sobre sexo y sexualidad están mal vistos. En octubre de 2009, un hombre saudí fue condenado a prisión y a recibir mil latigazos por hablar de sexo. Quién sabe, la tecnología también puede hacer evolucionar una cultura que actualmente reprime la diversidad de género. En conclusión, necesitamos tecnología para optimizar los recursos naturales con límites. Pero la atención debe centrarse en mejorar las condiciones de vida de la población y reducir la desigualdad.