La Paz, 20 de may 2025 (ATB Digital) .- Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) alertó el desvío de combustibles a un mercado negro, que acopia e impide que llegue al consumidor final. El gerente de Comercialización de la estatal, Álvaro Tumiri, atribuye a ese problema las filas en las estaciones de servicio, pese a que despachan a diario suficientes carburantes.
“Hay un fenómeno preocupante, la existencia de un mercado negro que está acopiando volúmenes y desviando el combustible, impidiendo que llegue al destino final: los vehículos de la población en general”, dijo Tumiri.
El funcionario reconoció que a inicios de la semana pasada hubo un “vacío” en los despachos desde la planta de Senkata debido a problemas logísticos relacionados a la importación y tránsito de cisternas; sin embargo, aseguró que actualmente los envíos diarios superan el 100%.
Sin embargo, las filas en las estaciones de servicio continúan, lo que hace presumir que existe un mercado negro que está acopiando el carburante.
En varias ocasiones autoridades reclamaron que la sobredemanda y las filas son producto del desvío de combustibles. Desde la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) se intensificaron los controles y precintaron más de 11 estaciones de servicio acusadas de complicidad en la venta irregular. Además, hallaron más de 20 vehículos con tanques adicionales o carguíos irregulares.
Combustible
Se presume que el combustible acopiado se desvía para actividades ilícitas como la minería ilegal, para el contrabando o para venderlo a precios más altos.
Tumiri remarcó que el objetivo de YPFB es superar los inconvenientes generados la semana pasada y restablecer el abastecimiento regular de carburantes. “Estamos comprometidos a seguir trabajando arduamente para reducir las filas”, afirmó, según un reporte del Ministerio de Hidrocarburos.
Entre el 1 y el 18 de mayo, YPFB despachó más de 109 millones de litros de diésel y 110 millones de litros de gasolina a través de sus 22 plantas de almacenaje en todo el país, superando los volúmenes registrados en el mismo periodo del año pasado.
En el caso de Santa Cruz, se despacharon más de 36 millones de litros de diésel y 15,5 millones de litros de gasolina, con un incremento del 6% respecto a 2024.
En La Paz, a pesar de los problemas logísticos, se entregaron más de 27 millones de litros de gasolina, también por encima de la gestión anterior.
En Cochabamba, los despachos también se incrementaron, pero Tumiri denunció que el problema de fondo es el desvío de combustibles hacia actividades ilícitas.
Fuente: La Razón