La Paz, 31 de may 2025 (ATB Digital).- En una noche cargada de emoción, memoria y compromiso con la verdad, la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, celebró la tercera edición del Reconocimiento Franz Tamayo al Periodismo de Investigación, una distinción que busca exaltar el valor de quienes dedican su vida profesional a revelar lo oculto, incomodar al poder y fortalecer la democracia desde la palabra escrita, hablada o visual.
“Hoy hemos vivido una gala espectacular, un reconocimiento muy merecido para los periodistas en Bolivia. Hemos certificado la calidad y el rigor del jurado internacional”, afirmó con entusiasmo Juan David Bernal, director ejecutivo del Consejo Latinoamericano de Acreditación de la Educación en Periodismo y Comunicación (CLAEP) de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), durante la ceremonia realizada el viernes 30 en La Paz.
Desde su creación, este reconocimiento ha contado con el respaldo de entidades internacionales como la SIP y el Congreso Hispanoamericano de Prensa, consolidándose como un espacio de referencia para valorar el periodismo de profundidad. En la edición 2025 participaron 123 trabajos de investigación periodística, evaluados por un comité conformado por 12 especialistas internacionales, destacando la objetividad y el compromiso ético como principales criterios.
“Tenemos que seguir investigando en periodismo porque nuestras sociedades nos lo demandan. La democracia está en deterioro, y el periodismo de investigación se vuelve cada vez más necesario y más complejo por las distintas formas de violencia que enfrentan los periodistas”, advirtió Bernal, enfatizando el papel de la prensa como garante de los derechos ciudadanos.
Entre los ganadores de la edición 2025, se encuentran destacados profesionales en nueve categorías. En medios digitales, el primer lugar fue para Daniel Rivera Matirayo, con la investigación “Bolivia, el país de la tierra envenenada”, publicada en Acceso y Conectas. En fotoperiodismo, Víctor Gutiérrez Guzmán y Wilma Perez Soliz fueron premiados por “El lodo acalló y enterró el rugido del auto de carrera”, en La Prensa.
La categoría independientes fue encabezada por Roberto Navia, Hilen Segovia y Clovis de la Jaille, con el reportaje “Guardianes del oro verde”, en la Revista Nómadas. En prensa escrita, Adriana Gutiérrez Ampuero obtuvo el primer lugar con “La última frontera de los pueblos en aislamiento voluntario en Bolivia”, publicado por El Deber. En televisión, Helga Velasco y Diego Villca fueron reconocidos por “Cifras y vivencias: mujeres y política en Bolivia”, emitido por Cadena A.
En el rubro Pulitfranz Junior, reservado para jóvenes estudiantes, el galardón fue para Dorian Lara Orellana, con “Tras los muros de Chonchocoro”, de Televisión Universitaria, Canal 13. En radio, Omar Escobar Mamani se destacó con “Los delirios de grandeza del exgeneral Juan José Zúñiga”, difundido por ERBOL. En agencias de noticias, la mención fue para Gabriel Romano y Luis Carlos Gandarillas, por su reportaje sobre una mujer indígena encarcelada tras denunciar acoso, publicado por la Agencia EFE.
En la categoría revista de investigación, se reconoció a Stanislaw Czaplicki, Roberto Navia y Carlos Quezada, por “Los dueños del desmonte: ¿Quién deforesta San Ignacio de Velasco?”, en Revista Nómada.
Además de los premios por categoría, se otorgaron reconocimientos a la trayectoria periodística a cinco figuras fundamentales del periodismo boliviano: Pedro Glasinovic, Amalia Pando, Alfonso “Toto” Arévalo, René Rosquellas y Abel Bellido “Abecor”, quienes han dedicado décadas a defender la verdad, muchas veces a costa de su tranquilidad y seguridad.
“Este premio lleva el nombre de un ilustre escritor, periodista y político: Franz Tamayo, quien junto a Daniel Sánchez Bustamante y Bautista Saavedra integró el primer Tribunal de Honor de la Asociación de Periodistas de Bolivia en 1920”, recordó emocionado Pedro Glasinovic, al recibir su distinción. “Es un andar lleno de pasión, de cosas bonitas y también de sinsabores”, añadió.
Desde la organización, se busca que este reconocimiento no solo premie la excelencia periodística, sino que inspire a las nuevas generaciones.
“Nuestro inspirador Franz Tamayo fue un excelente periodista y dejó un legado histórico de responsabilidad, ética y compromiso con la verdad. A través de este reconocimiento queremos plasmar ese legado y motivar a quienes trabajan en pos de la verdad y la libertad de prensa”, afirmó Pedro Saenz, vicerrector de la sede La Paz de Unifranz.
En medio de un panorama latinoamericano donde muchas universidades han optado por cerrar o reducir sus programas de periodismo, Unifranz se destaca como la única universidad boliviana con una licenciatura específica en esta área, apostando con firmeza por la formación de periodistas críticos, éticos y comprometidos.
“El Reconocimiento Franz Tamayo no es solo un galardón, es un llamado a la sociedad para valorar y proteger el trabajo de quienes hacen del periodismo su causa. Es una decisión contracultural, valiente y absolutamente necesaria”, sentenció Bernal.