Cochabamba, 09 de agosto del 2025 (ATB DIGITAL).- Al menos 75 fraternidades harán su paso por un recorrido de más de cuatro kilómetros en el municipio de Quillacollo, que está ya lleno de bailarines y espectadores.
Los zapateos, saltos y coreografías han empezado a hacer vibrar a las calles del municipio de Quillacollo, Cochabamba, donde ha empezado la esperada entrada folklórica en honor a la Virgen de Urqupiña.
Al menos 75 fraternidades son parte de este evento, que congrega a miles de personas en una muestra de fe y cultura.
“Es la expresión viva de nuestra cultura boliviana, porque revalorizamos nuestras costumbres y tradiciones ancestrales, a través de la fe y la devoción. Les esperamos en la tierra de la integración nacional para que juntos celebremos la festividad de la Virgen de Urqupiña”, convocó el alcalde de Quillacollo, Héctor Cartagena.
A primeras horas de la mañana de este sábado empezó el evento. El recorrido de esta gestión comprende al menos cuatro kilómetros. El último punto, y a donde llegan bailarines y creyentes desde temprano, es la parroquia de San Idelfonso, donde muchos ingresan de rodillas a los pies de la Virgen de Urqupiña.
URQUPIÑA
El recorrido empieza en la avenida Martín Cárdenas, sigue por la plaza de Las Sirenas y la avenida Circunvalación hasta la calle Ricardo Soruco. Las fraternidades seguirán su paso por la avenida Blanco Galindo, donde estará el palco, y seguirán hasta Plaza Bolívar.
El paso de las danzas seguirá por la calle Suárez Miranda, para continuar por un tramo de la 20 de Diciembre, para ingresar a la avenida Ballivián, seguir por la Héroes del Chaco y terminar en la plaza principal 15 de Agosto, en inmediaciones de la parroquia.
Graderías fueron dispuestas en todo el recorrido, mientras al menos 2.000 policías son desplegados para garantizar la seguridad en el evento.
Quillacollo pasa así por uno de los eventos principales de la festividad de la Virgen de Urqupiña: la entrada. No obstante, la agenda es amplia para quienes son devotos de esta celebración y expresan su fe incluso con el picoteo de piedras.
Previamente se realizaron también una entrada folklórica infantil y otra autóctona, todo concentrado en el municipio de Quillacollo.
Fuente: La Razón