La Paz, 23 de oct 2025 (ATB Digital) .- Este martes 22 de octubre, en una asamblea extraordinaria, el club Wilstermann aprobó la creación de la sociedad anónima Wilstermann 360, que asumirá el control institucional.
Los socios autorizaron que esta empresa administre al club durante 25 años, hasta 2050, y la gestión comenzará oficialmente una vez se rubrique el contrato definitivo.
El acuerdo establecerá las responsabilidades en los ámbitos deportivos, administrativos y económicos, con el objetivo de reordenar la estructura dirigencial y garantizar estabilidad financiera.
AUTORIDADES
Ángel Campero fue designado presidente de Wilstermann 360 y estará acompañado por el exfutbolista argentino Marcelo Bergese, quien asumirá la vicepresidencia y la representación legal, mientras que Jorge Ferrufino ocupará el cargo de secretario general.
Las acciones se dividirán entre los tres inversionistas principales: Ferrufino tendrá el 50% y anunció una inversión de diez millones de dólares en los próximos cinco años, sin rentabilidad inicial.
Ángel Campero aportará el 26%, mientras que Vladimir Campero tendrá el 24% restante.
APORTE
Además, durante el acto, el socio Stephan Müller entregó medio millón de bolivianos para evitar un colapso financiero inmediato.
El presidente actual de Wilstermann, Omar Mustafá, celebró la decisión al señalar que “todo cambio es bueno”, aunque dejó entrever que podría abandonar su cargo tras la transición dirigencial.
Mustafá recibió pedidos internos para que se realicen auditorías a las anteriores gestiones con el fin de establecer las causas del crítico estado económico del club.
CRISIS
La creación de Wilstermann 360 surge como respuesta a la crisis financiera, ya que el club arrastra deudas cercanas a ocho millones de dólares.
Ya en 2023, la directiva había planteado la conformación de una sociedad anónima para profesionalizar la gestión y evitar la desaparición institucional.
En lo deportivo, la situación impidió habilitar a nuevos futbolistas debido a sanciones por deudas, lo que dejó al equipo comprometido con la zona baja y bajo riesgo de descenso indirecto.
Fuente: La Razón