Santa Cruz, 11 de octubre 2022 (ATB Digital).- El cuerpo sin vida de una mujer que estaba en bolsas de yute esta mañana fue identificado como Miriam Anagua Quispe, de 55 años, quien fue asesinada por una deuda de Bs 20.000. La principal sospechosa de este crimen es Ana María Paredes Hinojosa, de 22 años, la mejor amiga de la víctima.
Según sus familiares, Miriam se encontraba desaparecida desde el viernes 7 de octubre cuando salió de su domicilio a visitar a una amiga. Nadie conocía del paradero de la mujer hasta este martes, cuando el taxista Jorge Martín G. Y. (37) alertó de la existencia del cuerpo sin vida en la vivienda de Ana María Paredes.
El taxista indicó que el “olor nauseabundo” lo hizo presumir que en el cuarto de la mujer había un cadáver. Fue así que los agentes de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) llegaron hasta el inmueble donde alquilaba Ana María, que está ubicado en el barrio Hilandería de la Radial 17 y medio, y encontraron el cuerpo sin vida.
El cuerpo se encontraba en descomposición y había sido puesto en un cesto plástico de ropa sucia y luego fue cubierto por varias bolsas de yute. La Felcc realizó el levantamiento del cadáver y lo trasladó a la morgue del Hospital Municipal de la Pampa de la Isla, donde se le practicó una autopsia.
La fiscal Francisca Rivero indicó que el examen forense develó que la víctima murió producto de una asfixia, motivo por el cual se aprehendió a Ana María Peredo Hinojosa y al taxista Jorge Martín G. Y. “La mujer murió por asfixia mecánica por sofocación, es decir la asfixiaron utilizando una almohada y tanto el taxista como la mujer quedaron aprehendidos”, agregó.
Rivero indicó que Ana María sería quien acabó con la vida de su amiga Miriam Anagua porque le debía Bs 20.000 por concepto de mercadería, puesto que ambas son comerciantes del mercado antiguo Abasto, que está ubicado en el tercer anillo y avenida Piraí.
Alfredo Álvarez, esposo de la víctima, cuestionó la demora de la intervención policial al indicar que la denuncia por desaparición la presentaron el viernes 7 de octubre, pero señaló que los efectivos de la Felcc se negaron a recibirla porque argumentaron que debía ser puesta 48 horas después de la desaparición de la persona.
Señaló que Ana María fue vista acompañando a Miriam a esperar la línea 80 que la debía llevar a su vivienda. Alfredo, sospecha que la aprehendida la llevó con engaños a su vivienda a la víctima, donde le quitó la vida.
Jorge Álvarez, hijo de la comerciante, también lamenta que la Policía no actuó de manera inmediata, pues presume que su madre estuvo privada de libertad el fin de semana y que el lunes fue asesinada. “Esta mujer se ganó la confianza de mi madre, hasta matarla”, dijo el joven al tiempo de pedir justicia por el crimen.
Fuente: El Deber