* WILLY MAYDANA
Desde hace varios meses, de las cañerías de agua potable de Montevideo, sale un líquido turbio de olor pestilente y de sabor salado imposible de beber, sin embargo, la sociedad no salió a bloquear calles ni los medios de comunicación salieron a pedir la cabeza de ningún ministro, todo lo contrario. Qué diferente al escenario vivido en nuestro país en diciembre de 2016.
Considerando que la escasez de agua en La Paz, fue en algunos barrios y no en toda la ciudad, y que la crisis del agua en Montevideo alcanza a casi 3 millones de personas, sorprende el nivel de tolerancia de los rioplatenses.
¿Por qué no hay psicosis del agua en Uruguay?
En una acción coordinada, los grandes medios de comunicación del país hermano, decidieron ser absolutamente condescendientes y benévolos con el presidente Luis Lacalle Pou, no en balde, es el representante de los sectores más conservadores, promotores de la reducción del Estado a su mínima expresión: tanto debe (el Estado) desentenderse de la cosa pública, que ahora no hay agua para el pueblo.
Para la población uruguaya, la falta de agua es culpa de la escasez de lluvias, en ningún caso del presidente Lacalle Pou, ni de sus ministros.
“Lo único que falta es que el gobierno tenga la culpa de la sequía”, declaró altanero el presidente Lacalle Pou, los medios asintieron condescendientes.
Para los bolivianos, la escasez de agua de diciembre de 2016, fue culpa del, entonces, presidente Evo Morales y sus ministros, nunca de las nubes caprichosas.
WILLY MAYDANA ES COMUNICADOR