Cochabamba, 5 ene 2024 (ATB Digital).- Katherine M.T., de 42 años, se convirtió en la primera víctima de feminicidio no solo de Cochabamba, sino de Bolivia. Su verdugo, Javier Zenteno F., de 42 años y con quien convivió durante cinco años, confesó su autoría y firmó ayer un acuerdo para someterse a un juicio abreviado, en el que recibirá la pena máxima de 30 años de privación de libertad sin derecho a indulto.
El crimen dejó a dos huérfanos; un niño de 5 años y una joven de 23. Norah, madre de Katherine, vive una pesadilla. La última vez que habló con su hija fue el domingo, cuando ella le contó que había sido agredida físicamente por su pareja. Sin embargo, minutos más tarde, el hombre la llamó para tranquilizarla y prometerle que la visitaría el fin de semana para conversar. Norah no había presenciado ni conocido antes ningún acto de violencia hacia su hija, por lo que pensó que todo estaba bien. La trágica noticia le llegó el miércoles a las 13:00, cuando le comunicaron que su hija había fallecido.
Finalmente, entre lágrimas y dolor, Norah, acompañada de otros familiares, recogió ayer el cuerpo de Katherine del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) para trasladarla a Quillacollo.
Según información proporcionada por el comandante de la Policía de Cochabamba, Jorge René Ríos, Javier Zenteno, conocido como El Loro, fue arrestado la noche del miércoles en la plaza Constantino Morales de Quillacollo. Este hombre fue responsable de quitarle la vida a Katherine, causándole ocho heridas punzocortantes en el pecho y en la espalda, y desde entonces, continuaba consumiendo alcohol.
El informe de autopsia elaborado por el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) establece que la víctima falleció debido a un shock hipovolémico hemorrágico, laceración de la aorta y traumatismo torácico penetrante.
El autor del crimen admitió su responsabilidad. Según el abogado, Raúl Revollo, el hombre afirmó que el martes había estado bebiendo alcohol puro con Katherine, pero no recuerda claramente todo lo sucedido. Sin embargo, reconoce que tuvo una discusión con su pareja y que la apuñaló con un cuchillo que, supuestamente, ella tenía en sus manos en principio. No recuerda cuál fue el motivo de la pelea, pero dice estar arrepentido.
El abogado señaló que el feminicida confeso acordó someterse a un juicio abreviado, que resultará en una sentencia de 30 años de prisión.
Zenteno tenía un taller de muellería, y su pareja, Katerine, trabajaba con él en el negocio.
TRÁGICO HALLAZGO
Katherine fue encontrada muerta en un callejón de la OTB Loyola de Quillacollo. Un vecino, camino a casa, la vio tendida en el suelo y pensó que estaba bajo efectos de alcohol y dormida. Llamó a los vecinos y a Radio Patrullas y Bomberos, pero al examinarla, se determinó que ya había fallecido. Por lo tanto, el caso fue remitido a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) y la Fiscalía para su investigación, ya que se trataba de una muerte violenta.
Inicialmente, el caso se consideró como homicidio, pero luego de las investigaciones, se recalificó como feminicidio, informó la fiscal departamental de Cochabamba, Nuria Gonzáles.
“El Equipo Multidisciplinario de la Fiscalía actuó rápido en este caso. Se recabaron pruebas indiciarias de la escena del crimen, que determinaron la forma y la fecha de la muerte de la víctima. Se entrevistó a la pareja de la mujer, y se esclareció el hecho”, dijo Gonzáles.
El miércoles, arrestaron a dos hombres, la pareja actual y la expareja de la víctima, con fines de investigación. Se conoció que la expareja la había agredido físicamente el 31 de diciembre de 2023, pero el último concubino es el responsable confeso del feminicidio.
JUSTICIA
La familia de Katherine exige justicia. Desde el colectivo Mujeres de Fuego, representado por Nivia Coca, piden que el feminicida reciba todo el castigo que establece la ley. Además de la pérdida de una vida, hay huérfanos y una familia sumida en dolor. Se espera que se dicte una sentencia condenatoria hoy.
Fuente: Opinión