La Paz, 09 de octubre de 2022 (ATB Digital).- El conflicto que activaron grupos de poder de Santa Cruz por el censo pretende en el fondo “reinstalar la vieja república” y recobrar los privilegios que perdieron con la creación del Estado Plurinacional que reconoció a los sectores sociales que fueron marginados por su condición y color de piel, aseguró el portavoz presidencial Jorge Richter.
“Lo que rechazan es el Estado Plurinacional de Bolivia, y lo que quieren es reinstalar la vieja república, este es el tema en esencia de fondo, porque el Estado Plurinacional de Bolivia les ha significado la pérdida de los privilegios que durante décadas habían logrado construir articulándose con el Estado para beneficiarse del Estado”, afirmó.
En 2019 los mismos grupos de poder radicales que hoy promueven un paro indefinido para adelantar el censo, articularon las protestas que acabaron con un golpe de Estado. Se hicieron del gobierno en ese entonces, pero en las elecciones de 2020 perdieron frente al presidente Luis Arce, quien ganó con más del 55% de la preferencia electoral.
“El golpe de estado de 2019 fue un intento desesperado de revertir el orden constitucional para que inmediatamente puedan ellos reinstalar el tiempo de la república, el tiempo del neoliberalismo y de las normas excluyentes y marginalizadoras de nuestra sociedad”, insistió y que por “el solo hecho de tener el color de piel en tomo más blanquecino te habilite a privilegios”.
Richter reiteró que el llamado Comité Interinstitucional, del que forman parte del gobernador Fernando Camacho, el líder cívico Rómulo Calvo y el rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), Vicente Cuéllar, hasta el momento no justificó su propuesta de censo y rehuyó el diálogo donde debía explicar su cronograma ante expertos internacionales.
Optaron por preparar el paro que empezará el 22, si hasta el 21 el Gobierno no cede a su exigencia de adelantar el censo.
“No podemos volver a ese estado de privilegio e injerencia, donde una enorme masa de ciudadanos tenga que estar resignada al anonimato y a no participar, mientras observan que otros sectores creen tener un derecho divino de administrar esto que se llama Bolivia”, afirmó en un análisis en Radio Kawsachun Coca.
Richter recordó que el propio Calvo, en agosto de 2020, calificó de “bestias humanas” a los sectores sociales que en ese entonces exigían elecciones.