Francia, 16 de diciembre 2022 (ATB Digital).- Dos libros de las ediciones más antiguas del ‘Quijote’, parte de la colección privada de Jorge Ortiz Linares, exembajador de Bolivia en Francia y yerno del barón del estaño Simón Iturri Patiño, se vendieron durante una subasta en París por 504.000 euros.
Los ejemplares, subastados el miércoles, corresponden a la tercera edición de “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha” de 1608 -la última corregida por el propio autor Miguel de Cervantes- y a la primera edición de 1615 de la “Segunda Parte del ingenioso caballero Don Quijote de la Mancha”, según datos de la agencia mexicana de noticias La Verdad.
Linares era coleccionista de libros antiguos y considerado un referente cultural y artístico en París, poseía una biblioteca con ediciones únicas de Molière, Descartes, así como algunos ejemplares de Cervantes.
Vivía con su familia en un palacete de la capital francesa; su esposa Graziella Patiño era hija del magnate boliviano Simón I. Patiño, conocido como “el rey del estaño” y considerado uno de los hombres más ricos del siglo XX.
De acuerdo con los datos, los libros fueron adquiridos por Ortiz en 1936 de la librería especializada en ediciones de libros antiguos Maggs Bros, ubicada en Londres.
Otro de los tomos que sobresalían en la colección de Ortiz es la primera edición “pirata” del Quijote, que contenía la primera ilustración del Quijote y Sancho Panza, y que fue subastada por 56.700 euros, informó la casa de subastas Sotheby’s.
Entre los libros de literatura de autores latinoamericanos, destacaron dos obras de Inca Garcilaso de la Vega “La Florida del Inca” sobre la colonización española del Perú, que alcanzó los 107.100 euros; y “Comentarios reales de los Incas”, sobre las costumbres de este pueblo de la América precolombina, vendida por 25.200 euros.
En la década del 30 y 40, Patiño fue nombrado el Rey del Estaño porque era dueño de Patiño Mines, la segunda empresa más grande del mundo. La primera empresa era la Standard Oil, una sociedad anónima con varios socios.
Fuente: ABI