España, 24 de dic 2023 (ATB Digital).- La celebración de la Navidad, llena de alegría y reuniones familiares, es también una época del año en la que aumentan significativamente los casos de enfermedades cardiovasculares.
Sorprendentemente, según el Dr. César Carballo, el día de Nochebuena se posiciona como el día con mayor incidencia de infartos en todo el año. El estrés emocional asociado a estas festividades, sumado al aumento en el consumo de alimentos y bebidas, contribuye a este preocupante fenómeno, especialmente para aquellos que ya padecen enfermedades cardíacas o presentan factores de riesgo cardiovascular.
De acuerdo con el medio español ‘La Sexta’, diversos estudios respaldan esta conexión entre las festividades navideñas y los problemas cardíacos. En 2018, una investigación sueca publicada en el ‘British Medical Journal’ reveló que las personas mayores de 75 años con diabetes y cardiopatías enfrentan un riesgo un 37% mayor de sufrir un infarto durante la Nochebuena.
Además, el mismo estudio señaló que tanto las vacaciones de Navidad como las de verano presentan un aumento del 15% y 12%, respectivamente, en los casos de ataques al corazón en comparación con las dos semanas anteriores y posteriores a dichas fechas.
Por otra parte, un análisis llevado a cabo por la Universidad de Duke en los Estados Unidos corrobora esta preocupante tendencia, ubicando el 25 de diciembre como el día con mayor número de fallecimientos por infartos en todo el año. Este dato, respaldado por la Fundación Española del Corazón, destaca la urgencia de abordar el problema de salud cardiovascular durante la temporada navideña.
El estrés emocional como factor agravante
El estrés emocional durante las fiestas de fin de año, particularmente para personas mayores y aquellas ya afectadas por enfermedades, añade una capa adicional de riesgo.
Las causas de dicho aumento en los fallecimientos cardíacos se centran en dos aspectos fundamentales: el menor control de los factores de riesgo cardiovascular y los factores psicológicos asociados a la emotividad y nostalgia típicas de estas fechas, combinados con el estrés y las tensiones familiares.
Enfermedades navideñas: un análisis exhaustivo de los riesgos para la salud
Según el portal web ‘VIVOLABS’, las festividades navideñas, un período de alegría y celebración, también presentan desafíos significativos para la salud. Más allá de las reuniones familiares, las comidas festivas y la alegría compartida, la temporada también se asocia con un aumento en diversas enfermedades.
Conocer dichos riesgos es fundamental para adoptar medidas preventivas y garantizar que la Navidad no deje secuelas en la salud. A continuación, exploramos los principales problemas de salud que se manifiestan durante la Navidad.
1. Resfriado común: infecciones virales que aprovechan el invierno navideño
El resfriado común, causado por rinovirus, adenovirus, coronavirus y otros agentes infecciosos, afecta tanto a adultos como a niños. Durante la Navidad, la incidencia de resfriados aumenta significativamente debido a la mayor aglomeración de personas en espacios cerrados durante reuniones familiares y eventos festivos.
2. Gripe: la enfermedad invernal más debilitante
La gripe, más incapacitante que el resfriado común, experimenta un claro pico epidemiológico durante el invierno. Las reuniones en espacios cerrados durante las celebraciones navideñas facilitan la transmisión del virus. Es importante recordar que la gripe se caracteriza por fiebre y se diferencia del resfriado común.
3. Dolor de espalda: un malestar físico amplificado en la época festiva
La lumbalgia, que cursa con dolor en la parte baja de la espalda, afecta al 80% de la población en algún momento de su vida. Durante la Navidad, el aumento de peso debido a las compras y los movimientos inadecuados al decorar la casa pueden contribuir a la aparición o exacerbación de este dolor.
4. Intoxicación por alcohol: riesgos de las celebraciones descontroladas
El consumo excesivo de alcohol durante las festividades navideñas se vuelve más frecuente, con hasta un 61% de los consumidores tomando bebidas alcohólicas de manera descontrolada. Además, la combinación de alcohol y conducción nocturna puede aumentar la incidencia de accidentes de tráfico, siendo la intoxicación alcohólica una consecuencia grave y potencialmente mortal.
5. Indigestión: efectos secundarios de las celebraciones abundantesLas investigaciones científicas indican que los adultos ganan entre 0,4 y 0,9 kilos de peso durante la temporada navideña. Aunque reunirse para comer y celebrar es tradicional, es importante tener precaución con el exceso de comida, ya que puede manifestarse en forma de indigestión, conocida clínicamente como dispepsia.
6. Desafíos emocionales: depresión y ansiedad en el centro de atenciónLa Navidad también puede afectar la salud mental, con un aumento del 64% en el empeoramiento de condiciones psicológicas durante las festividades. Temas delicados, como relaciones familiares complejas o la pérdida de seres queridos, pueden intensificar sentimientos de tristeza y apatía, destacando la importancia de buscar ayuda psicológica cuando sea necesario.
7. Ansiedad: el estrés navideño y sus manifestaciones
La ansiedad, un sentimiento de temor e inquietud, puede intensificarse durante la época navideña debido a diversos factores estresantes. La gestión del tiempo, las compras en lugares congestionados y las tensiones financieras son solo algunos de los estresores que pueden contribuir a la ansiedad.
8. Bronquiolitis: un riesgo para los más pequeños durante las celebraciones
La bronquiolitis, inflamación de los bronquiolos en los pulmones, afecta principalmente a la población infantil. Durante la Navidad, la aglomeración de niños en espacios cerrados facilita la transmisión de agentes víricos, convirtiendo esta condición en una de las causas más comunes de ingreso en las plantas de pediatría.
La temporada navideña, lejos de ser solo un tiempo de alegría, lleva consigo un aumento significativo en los casos de enfermedades cardiovasculares. Para contrarrestar esta tendencia, los especialistas instan a disfrutar de las festividades con moderación y a mantener rutinas saludables, como el seguimiento estricto de la medicación, la práctica de ejercicio físico adaptado y la no postergación de las visitas médicas.
Adoptar medidas preventivas y buscar ayuda profesional cuando sea necesario puede marcar la diferencia entre unas festividades memorables y problemas de salud innecesarios
Fuente: Prensa Gráfica