La Paz, 07de ene 2024 (ATB Digital).– En promedio, 3,9 millones de pasajeros por mes fue el flujo del transporte carretero que se desplazó por las rutas de eje troncal en 2023. Esto representa un crecimiento del 29% respecto a los 3 millones de pasajeros desplazados por las mismas vías en 2022.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), con base en información de la Policía Boliviana, evidencian que el transporte terrestre continúa siendo el medio de locomoción de mayor preferencia de los bolivianos para viajar.
Según la oficina estatal, en los primeros 10 meses de 2023 se registró un flujo promedio de 39 millones de pasajeros entre los departamentos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, frente a los 30 millones de usuarios registrados en el mismo periodo de 2022.
En tanto, las salidas complementarias que comprenden los departamentos de Oruro, Potosí, Tarija, Beni y Pando registraron un flujo de 7 millones de pasajeros.
Para el gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, el incremento de personas en transporte terrestre por las carreteras del eje troncal en el país puede llevar a varias interpretaciones desde el punto de vista económico.
“No deja de llamar la atención la tasa incremental del uso del modo carretero, ya que la subida en un 30% resulta altísima y de beneficio, inicialmente, para los prestadores del servicio de transporte y servicios externos”, destacó.
Sin embargo, indicó que uno debe de preguntarse si esta subida es “la consecuencia de un mayor movimiento de comercio, transporte de bienes de exportación e importación, prestación de servicios personales, realización de turismo interno o, también, la preferencia de utilizar la flota o vehículo propio en lugar de utilizar el modo aéreo, considerando las bondades de las modernas carreteras que se han habilitado”.
“Cual sea la explicación, todo ello conlleva un gran movimiento económico para la venta de pasajes, compra de combustible, consumo de comida en el trayecto, cobro de peaje, etcétera, todo lo cual, definitivamente, dinamiza la economía del país”, resaltó.
Sin duda alguna, las terminales terrestres habilitadas en todo el país por la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT) representan una participación de entre 21% a 22% de la cantidad de pasajeros desplazados en las carreteras, esto en base a la comparación de las gestiones 2019 y 2021 de las “Estadística Sectorial de Transporte y Servicio Postal 2021” de la entidad reguladora.
La Razón envió un cuestionario a la ATT para conocer el comportamiento sobre el flujo de pasajeros en terminales terrestres, ferroviario y aéreo. Sin embargo, no fue atendido el requerimiento de esta casa periodística.
Jaime Veizaga, administrador de la terminal de Buses de la Terminal de Cochabamba, informó que en comparación de 2022, la pasada gestión (2023) se tuvo un incremento del 15% en el flujo de pasajeros, principalmente luego de que se quitaran “totalmente” las restricciones que el Gobierno impuso para hacer frente a la pandemia del COVID-19.
“Esto significa que hubo mayor movimiento operativo, se tuvo que coordinar con todo el personal operativo y administrativo de la terminal para brindar un servicio eficiente a todos los usuarios de la terminal de Cochabamba”, dijo.
Explicó que de forma diaria salen 250 flotas, aproximadamente, en diferentes horarios y durante todo el día de las 107 empresas de transporte que operan a nivel interdepartamental y 11 empresas internacionales, con un promedio aproximado de 8.300 pasajeros por día y 250.000 de manera mensual.
Las rutas más solicitadas, según Veizaga, son Santa Cruz, La Paz y Oruro, regiones de mayor movimiento económico y comercial.
Américo Gemio, administrador de la Terminal de Buses de La Paz, recordó que como efecto del COVID-19, el sector terrestre no solo en Bolivia, sino mundial redujo en 30% sus operaciones.
“No quiere decir que los sistemas de aviación hayan incrementado, sino que se generó una psicosis donde se señaló que este sector era uno de los lugares más contaminantes por el tema de la enfermedad, lo cual motivó a que la gente reduzca la cantidad de viajes y la gente prefiera utilizar un vehículo privado”, relató.
Si embargo, el funcionario edil indicó que desde mediados de 2021, esa terminal tuvo una crecida de ingresos importantes y logró devolver la confianza al usuario. “Podemos decir que el 2023 ha estado mejor. Hemos recibido entre las dos terminales 2,6 millones de pasajeros, respecto a los 2 millones de 2022, que representa un incremento del 10% de los viajes”.
La Razón también envió un cuestionario al director de la Terminal Bimodal de Santa Cruz para conocer sobre el flujo de pasajeros, pero no se atendió la solicitud.
Por mes, 393.491 personas viajaron en rutas aéreas
El flujo del transporte aéreo movilizó en los primeros 10 meses de 2023 (enero a octubre) un promedio de 3,9 millones de pasajeros que representa el 6,7% de incremento respecto a 2022 cuando se movilizó 3,6 millones.
Es decir, 393.491 personas se movilizaron por mes solamente en las rutas aéreas nacionales y otra cantidad de 60.776 de viajeros por mes llegaron y salieron por los diferentes aeropuertos del país a rutas internacionales.
En ese periodo llegaron 302.607 pasajeros de destinos internacionales y salieron 305.157.
Los datos reflejados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), con base en datos de la Dirección General de Aeronaútica Civil (DGAC), evidencian que hasta octubre de la gestión pasada, 2,7 millones de pasajeros realizaron vuelos a los diferentes destinos de la ruta troncal (La Paz, Cochabamba y Santa Cruz), ruta principal (otras ciudades capitales) un millón de pasajeros y ruta secundaria (ciudades intermedias) 115.285 pasajeros.
La ruta secundaria comprende vuelos a las regiones de Riberalta, Guayaramerín, Magdalena, Rurrenabaque, San Joaquín, San Ignacio de Velasco, San Ramón y San Borja, en el departamento de Beni. Además a Camiri, Santa Cruz; Yacuiba, Tarija; y a Uyuni, en Potosí.
De enero a octubre de 2023, la aerolínea estatal Boliviana de Aviación (BoA) transportó a más de 2,3 millones de pasajeros en las rutas del eje central.
Esa cantidad de pasajeros fue trasladada en 18.798 vuelos en las tres rutas principales del país, según informó la estatal BoA a través de un cuestionario enviado por La Razón.
La aerolínea estatal cuenta con el 82,5% del mercado nacional. Reportó un repunte en el crecimiento de vuelos en el territorio nacional luego de la pandemia del COVID- 19, principalmente en 2022, lo que muestra que a la fecha BoA sea una de las empresas más importantes de la región.
Una nota publicada el 11 de junio de la pasada gestión indica que el transporte aéreo de pasajeros en Bolivia se recuperó en los últimos dos años y ha superado los niveles registrados antes de la pandemia.
De acuerdo con los datos de la DGAC sobre el transporte aéreo de pasajeros, en 2022 se trasladó a 5,77 millones de viajeros, un 29,3% más que los 4,46 millones registrados en 2021. El crecimiento llega a 122,1% (más del doble) si se lo compara con 2020, en plena pandemia, cuando el número de pasajeros transportados fue de sólo 2,6 millones. Respecto a los pasajes vendidos para vuelos comerciales en 2019 (5,67 millones), antes de la aparición del virus, el incremento era de 1,8%. Administración de 2 terminales ponderan el aumento de pasajeros.