El Alto, 02 de mar 2024 (ATB Digital).- Elías Fernández, un hombre que perdió su empleo durante la pandemia, aprendió a reciclar botellas las cuales convirtió en vasos floreros y demás piezas de arte, ahora es un exitoso emprendedor. Un dicho popular reza que “solo el flojo se muere de hambre”, esta frase refleja muy bien la historia de Elías Fernández quien tiene un alma de emprendedor, después de la pandemia del coronavirus este joven se quedó sin trabajo y no se echó a llorar, pensó en cómo sobresalir y empezar un negocio. Ahora es dueño de un emprendimiento exitoso.
Al ver que en casa se necesitaba cada día el alimento y otras necesidades básicas, no dudo dos veces y se fue al centro de la ciudad de El Alto, donde abundan los locales nocturnos y buscó en los basureros donde encontró muchas botellas de vidrio y cristal, para él era oro en bruto, pues es la materia prima para realizar su trabajo.
Paulatinamente, su actividad fue ganando fama y varios dueños de los locales que también trabajan en sintonía con el cuidado del medio ambiente decidieron apoyarlo entregándole todas las botellas que recaudan de sus locales. Elías no solo cuida el medio ambiente reciclando botellas, las herramientas con que fabrica los vasos y floreros también fueron ensamblados con material reciclado, por ejemplo, combinó un taladro con el disco de una amoladora le puso una lija especial para quitar las asperezas a los cristales cortados, otra de sus creaciones es una cortadora.
Este emprendedor es muy ingenioso y cuida cada detalle de los trabajos que realiza, por eso trata de rescatar botellas con diseños peculiares, sobre todo que tengan estrecha relación con nuestra cultura. En afanes de su búsqueda de materia prima encontró algunas botellas qué son consideradas reliquias, pues ya no están en circulación del mercado, es un ejemplo destacable, pues, Elías no solo trabaja con su esposa e hijos, sino también cuida nuestro medio ambiente y uno de sus grandes deseos es que todos nos sumemos a esa iniciativa. Por todo eso desde la red ATB destacamos su gran labor
Fuente: Sala de redacción ATB