La Paz, 12 de diciembre de 2022 (ATB Digital). – Varios amigos reunidos para ver un partido del Mundial de fútbol ordenan comida por teléfono mediante una aplicación de delivery, a los pocos minutos un motorizado les lleva su pedido hasta la puerta de su casa, se hace la entrega y ellos pagan con tarjeta de crédito. Este es un caso entre miles de usuarios en Bolivia que optan por las compras en línea.
Internet se ha convertido en una herramienta que es parte de la vida diaria de la población y como un efecto pospandemia se ha visto que en Bolivia se empezó a usar cada vez más esta posibilidad que brinda la tecnología, no solo para fines de comunicación o distracción, sino también para generar comercio electrónico.
“La presencia de la pandemia permitió cambiar el estilo de hacer negocios y compras. Internet ha irrumpido causando una explosión y revolucionando las transacciones, podemos decir que después de la pandemia Bolivia en un año ha logrado dar un salto tecnológico de cuatro años”, explicó el experto Boris Ugarte, coordinador nacional de Marketing en la Universidad Central (Unicen).
De acuerdo con el experto, en un año —entre 2020 y 2021— se evolucionó lo que representaría a cuatro años, es decir, que se presentó una aceleración en este ámbito, primordialmente por el incremento del uso de internet y su llegada a la población, eso profundizó todo lo que es el comercio electrónico en el país.
Precisó que por mucho tiempo la costumbre de la gente era acudir a la tradicional tienda, es decir, a un comercio físico donde se exponen y venden los productos, esto fue lo tradicional que caracterizó a los negocios por mucho tiempo, pero esto ha cambiado a partir de la pandemia y la socialización del uso de internet.
“El comercio electrónico ha explosionado y actualmente en Bolivia 5,5 millones de personas tienen acceso a internet, de un total de 11 millones de población; entonces, estamos hablando de que el 50% de la gente ya tiene acceso a internet”, manifestó.
Según los datos que proporcionó Ugarte, en Bolivia se registran actualmente más de 12 millones de conexiones a internet en teléfonos móviles y considerando la población total de 11 millones las conexiones sobrepasan a esta cifra, esto demuestra que en el país hay actualmente más teléfonos celulares que población.
El portal Hootsuite informa que la actividad o penetración de las redes sociales en Bolivia representa 75%, con 7,5 millones de personas activas.
“Esto es un avance importante, ya que esa tiendita de barrio o algún emprendimiento o negocio ahora pueden migrar al internet y hacer todo a través del e-comerce”, dijo el experto.
Según datos del portal Statista, en 2019 el volumen del comercio electrónico en Bolivia fue de $us 278 millones y en 2020 superó los $us 490 millones.
Ugarte manifestó que el 7,1% de la población ya realiza de forma cotidiana transacciones y pagos a través de un teléfono celular, es decir, más del 50% ya está practicando las transacciones en línea y la utilizan como una herramienta cotidiana.
El comercio electrónico —explicó— es una tendencia mundial que consiste en que la promoción, distribución, venta, pago y la entrega del producto se efectúan netamente en línea, en este caso desde su domicilio, sin un horario u otras restricciones.
Tomando en cuenta que el 7% de la población ya está haciendo sus transacciones por un celular, podemos decir que también realiza no solo comercio, sino también hace transacciones bancarias, cuenta con tarjeta de crédito o débito y en este aspecto se destaca que los bancos también ya se han integrado y han implantado sus plataformas móviles.
De acuerdo con datos estadísticos, se evidencia que en 2025, en unos tres años, se va a contar con un 79% de la población en Bolivia que haga transacciones por un móvil de manera cotidiana.
Según un informe de Digital Bolivia, un 51% de la población tiene una cuenta en alguna institución financiera, 7,2% tiene una tarjeta de crédito, 9% hace compras en línea y/o paga facturas en línea, y el 7,1% tiene una cuenta de billetera móvil.
Para impulsar el comercio electrónico en Bolivia, los bancos están implementando procedimientos que permiten a las personas abrir cuentas bancarias en línea. Por lo tanto, los consumidores bolivianos ahora pueden obtener una tarjeta de débito o crédito sin salir de casa. Estas medidas conducen a un aumento de usuarios que practican el comercio electrónico.
En el país, actualmente los métodos de pago son: tarjetas de débito/crédito, billeteras móviles, pagos por QR y pagos a través de WhatsApp y Facebook Messenger.
Ugarte opinó que esto se constituye en un “salto realmente impresionante” para todo lo que significa el comercio electrónico.
“Actualmente, la habilitación de los QR en muchas empresas o emprendimientos es una muestra de que esto está avanzando y generando nuevas formas para las transacciones”, agregó.
A manera de reflexión, Ugarte precisó que se debe hacer una “llamada de atención” a muchos comercios para que se actualicen o tengan tiendas virtuales, ya que no van a perder mucho porque el pago por celular va a “explosionar”.
“En Bolivia también tenemos tiendas virtuales bolivianas que ya están realizando acciones concretas y han adelantado lo que a ventas virtuales se refiere, sin nada que envidiar a otros portales mundiales que están dando un resultado muy importante”, dijo.
Mencionó el caso de FLO.bo, que es básicamente un supermercado donde uno puede comprar desde un televisor hasta un artículo de decoración con toda la garantía de entrega y respaldo legal en la transacción.
Un aspecto que tiene mucha influencia es la generación más joven que por naturaleza tiene más predisposición al uso de la tecnología y la realización de transacciones virtuales, es el caso de muchos jóvenes de 25 a 30 años de edad que actualmente están llevando a cabo mayores emprendimientos y lo hacen apoyados en lo que es lo virtual.
Pero, poco a poco, por la dinamización, otras personas mayores de 40 años se están actualizando y de a poco están entrando a esta dinámica, ya están manejando los QR, tienen una banca móvil, billeteras móviles, entre otros mecanismos de e-comerce.
Hay 300 millones de compradores digitales
América Latina es el hogar de aproximadamente 300 millones de compradores digitales, una cifra que se prevé que crezca más del 20% de cara a 2025.
Aunque la adopción del e-commerce en esta parte del mundo aún es menor que en otras regiones emergentes, se espera que las ventas minoristas en línea en América Latina alcancen los 85.000 millones de dólares estadounidenses en 2022 y aproximadamente los 160.000 millones en 2025.
De acuerdo con Statista Digital Market Outlook, se pronostica que América Latina alcance cerca de 337 millones de usuarios de comercio electrónico en 2023. Entre 2022 y 2025, se espera que este número aumente un 22%, lo que resultará en unos 390 millones de usuarios en toda la región a cierre de dicho periodo.
En el ámbito regional, Brasil y México compiten por ser el centro de atención, representando el 31% y el 28% del mercado de comercio electrónico de América Latina, respectivamente. Sin embargo, otras economías como Argentina, Perú y Colombia han comenzado a destacar debido a su rápido crecimiento.
Según el estudio de Kantar, realizado para Mercado Libre, se muestra que las categorías con mayor crecimiento durante 2019 fueron vestimenta y accesorios; celulares y teléfonos, y electrónica, audio y video.
Algunos medios de pago se están adaptando a las grandes tendencias globales, como la transición hacia las billeteras digitales en 2019, aunque todavía esto representa el 6% de los pagos en el e-commerce, según el portal PPRO.
Los pagos a través de tarjeta todavía siguen dominando con un 62%, de los cuales el 51% corresponde a la tarjeta de crédito y el 11% a tarjeta de débito. Los pagos mediante un voucher para pago en efectivo representan el 21%.
Americas Market Intelligence brindó un informe en el portal Economy. Según este estudio, más de 101 millones de personas compraron en línea por primera vez entre 2020-2021, la penetración del comercio electrónico fue del 67% y más de 100 millones de personas se bancarizaron en 2019, de los cuales el 80% son partícipes de la economía digital.
Fuente: Ahora El Pueblo